La inteligencia artificial está transformando radicalmente la formación corporativa, convirtiendo sistemas tradicionales en experiencias de aprendizaje personalizadas y adaptativas. Las empresas que implementan eficazmente estas tecnologías no solo mejoran la formación de sus equipos, sino que también obtienen ventajas competitivas significativas. Foxize MyTutor representa esta evolución, actuando como un tutor digital personalizado que potencia cualquier ecosistema formativo existente.
La implementación de inteligencia artificial en los procesos formativos de una organización no es una simple actualización tecnológica; requiere una planificación estratégica que considere tanto aspectos técnicos como humanos.
Para que un proyecto de IA tenga éxito, es fundamental entender claramente cuál es el problema que buscamos resolver. Debemos comenzar por conocer en profundidad nuestros procesos empresariales, comprendiendo el flujo de actividades e identificando los «pain points» donde la IA puede marcar una diferencia significativa. Solo con este conocimiento podremos establecer objetivos claros y medir el impacto real en términos de beneficios y eficiencias.
La base documental es crucial para cualquier proyecto de IA. Es necesario preguntarse: ¿La documentación necesaria ya existe? ¿Está digitalizada? ¿Está actualizada? ¿Dónde se encuentra almacenada? Estas preguntas determinarán la viabilidad técnica de la implementación de herramientas como Foxize MyTutor, que necesita información estructurada para ofrecer una experiencia personalizada.
Como revela un estudio reciente de la Universidad Aalto, aproximadamente el 80% de las grandes empresas no consiguen obtener los beneficios esperados de sus iniciativas de IA, y esto no se debe a limitaciones tecnológicas sino a factores humanos. «El elemento humano—los sentimientos, miedos y aspiraciones de los empleados—sigue siendo primordial para orquestar una integración exitosa de la IA«, señala la investigación. La profesora Natalia Vuori y su equipo han identificado que la desconexión entre la confianza cognitiva (creer en la competencia de la herramienta) y la confianza emocional (cómo se sienten los empleados al usarla) es un factor decisivo en el éxito o fracaso de los proyectos de IA.
Un informe reciente de The Confluencial destaca que “el 85% de los empleados afirma que es más probable que permanezcan en una empresa que invierte en sus habilidades. La IA debe empoderar, no alienar». Esta estadística refuerza la importancia de centrarse en las personas durante la implementación de IA.
Para implementar con éxito soluciones como Foxize MyTutor en tu organización, se recomienda seguir un enfoque estructurado:
El primer paso para una adopción exitosa es fomentar una cultura abierta al cambio. Como detalla Fernando de la Rosa, en Foxize implementaron los principios «Open to explore» y «Share to learn». El primero implicaba que todos los empleados debían explorar herramientas, formarse y documentar aprendizajes sobre IA. El segundo establecía que cada viernes, una persona del equipo compartía un aprendizaje relacionado con IA, creando así un repositorio interno de conocimiento accesible para todos. Este enfoque pragmático, característico de las pymes digitales según Fernando de la Rosa, permite «experimentar con nuevas tecnologías sin grandes discusiones» y facilita la adaptación ágil a nuevas herramientas.
Una de las principales barreras para la adopción de IA es la brecha entre las «tecnologías del siglo XXI» y las «habilidades del siglo XX» que aún dominan en muchas organizaciones. Es fundamental proporcionar formación adecuada que permita a los profesionales integrar la IA en su día a día. Como demuestra el caso de Foxize, tras nueve meses de aprendizaje y práctica, la evaluación media de habilidades en IA del equipo pasó de 2,9 a 7,5 sobre 10, logrando que el 100% del equipo utilice IA diariamente en sus tareas específicas.
Siguiendo el consejo de Albert Garcia Pujadas: «Empieza como piloto. Aprende rápido. Escala cuando estés preparado». La adopción de la IA debe ser gradual, comenzando con proyectos piloto que permitan evaluar el impacto y ajustar la estrategia antes de expandirse. Jon Lexa, Presidente de Sana, refuerza esta perspectiva al señalar: «Estamos apenas en el umbral de entender cómo interactuar con el aprendizaje impulsado por IA. Los asistentes de aprendizaje con IA no solo entregan contenido; analizan lo que una persona sabe, predicen lo que necesita a continuación y se adaptan en tiempo real». Esta visión de experto subraya por qué Foxize MyTutor debe implementarse inicialmente en áreas específicas de formación, permitiendo que tanto la organización como los usuarios se familiaricen con la tecnología y puedan aprovechar su capacidad de personalización progresiva, expandiéndose sólo después de validar resultados concretos.
Para asegurar que la implementación de Foxize MyTutor y otras soluciones de IA sea exitosa, es importante considerar estos factores críticos:
Conocimiento profundo del negocio
Es crucial entender claramente los procesos empresariales donde la IA puede marcar una diferencia significativa. Solo con este conocimiento podremos establecer objetivos claros y medir el impacto real en términos de beneficios y eficiencias.
Base de conocimiento robusta
La gestión adecuada de la documentación es fundamental. Esta debe estar digitalizada, actualizada y accesible, con formatos estandarizados que la IA pueda procesar eficientemente. Foxize MyTutor se nutre de esta base para proporcionar respuestas relevantes y contextualizadas.
Viabilidad técnica asegurada
Los expertos técnicos deben elegir la solución que ofrezca el mejor equilibrio entre costo y beneficio, y la IA que mejor se ajuste a las necesidades específicas de la organización. Foxize MyTutor ofrece esta adaptabilidad, «evolucionando junto a los alumnos y ajustándose a sus necesidades».
Validación continua con usuarios finales
Los usuarios finales deben participar desde el inicio, proporcionando retroalimentación que permita ajustar y mejorar la interacción con la IA. Foxize MyTutor facilita esta validación al evolucionar continuamente con «optimización en tiempo real».
Como relata Pilar Villanueva de Foxize en su artículo «Making of Pasaporte IA«, el desarrollo de soluciones formativas basadas en IA es en sí mismo un viaje de aprendizaje. «Hemos pasado de la curiosidad a la incertidumbre, de la frustración a la satisfacción, y de la teoría a la práctica», comparten desde Foxize sobre su experiencia creando Pasaporte IA y MyTutor.
Este proceso reveló que «enseñar IA no es solo explicar cómo funciona, sino ayudar a desarrollar el criterio para usarla bien».
El equipo de Foxize descubrió que lo más valioso no fue la tecnología en sí, sino cómo esta se integra en el día a día para mejorar el trabajo. Como señalan: «cuanto más nos metimos en la tecnología, más claro tuvimos que el factor humano sigue siendo lo que realmente marca la diferencia». Este aprendizaje es fundamental para cualquier organización que busque implementar soluciones de IA: la tecnología es solo una herramienta, mientras que las personas son quienes determinan su verdadero impacto.
La implementación de soluciones de IA como Foxize MyTutor debe evaluarse mediante KPIs concretos que demuestren su impacto real:
Métricas de adopción y uso
Es importante monitorizar el nivel de utilización de la herramienta. En el caso de Foxize MyTutor, han registrado «un aumento del 25% en el tiempo medio que los usuarios pasan dentro de la plataforma formativa», lo que indica una mayor implicación en el proceso de aprendizaje.
Indicadores de rendimiento del aprendizaje
La efectividad de la solución debe medirse en términos de mejora del aprendizaje. Por ejemplo, con MyTutor se ha observado «una mejora del 18% en la finalización de itinerarios formativos», mostrando que los usuarios no solo consumen más contenido, sino que completan su formación.
ROI cuantificable
Los KPIs relacionados con la IA deben demostrar un retorno de la inversión concreto, ya sea en tiempo, dinero o trabajo. Esta medición debe basarse en métricas directamente observables y luego traducirse a otros indicadores según sea necesario.
En este proceso de transformación digital, Pasaporte IA se convierte en un aliado fundamental:
Pasaporte IA es una formación 360° para profesionales que quieran potenciar sus habilidades con la IA. El programa está dividido en 3 grandes bloques que cubren 8 habilidades profesionales esenciales para la era digital.
El programa Pasaporte IA incorpora un sofisticado test de evaluación que permite a los profesionales obtener un mapa detallado de sus competencias en el uso de la IA, identificando con precisión tanto sus fortalezas como las áreas que requieren desarrollo. Los resultados actuales revelan un dato revelador: la media de puntuación se sitúa en apenas 2,3 sobre 10, evidenciando la considerable brecha de habilidades digitales presente en la mayoría de organizaciones.
Esta situación representa simultáneamente un desafío y una oportunidad, pues como demuestra una investigación de Gallup citada por Petra Mayer Consulting, «las empresas con empleados altamente capacitados y comprometidos registran un 81% menos de absentismo y un 14% más de productividad». Estos datos subrayan el impacto directo que tiene la inversión en programas formativos personalizados como Pasaporte IA, que no solo desarrollan competencias técnicas, sino que también incrementan significativamente el rendimiento organizacional.
Pasaporte IA está diseñado para que los usuarios incorporen la IA en su cotidianidad de manera práctica, con ejemplos reales que demuestran cómo esta tecnología puede optimizar tareas diarias, mejorar la toma de decisiones y facilitar la colaboración.
La implementación de Foxize MyTutor, apoyada por programas como Pasaporte IA, no es simplemente una cuestión de adoptar nueva tecnología, sino de transformar la cultura organizacional hacia una mentalidad de aprendizaje continuo y adaptación. En un mundo donde sobran contenidos y plataformas, lo que escasea es «relevancia, contexto y acción». Foxize MyTutor responde a esta necesidad, ofreciendo un sistema que personaliza el aprendizaje según los retos profesionales de cada individuo.
Como se destaca desde Foxize, «no queremos que la gente aprenda más, sino que aprenda mejor». Este enfoque, centrado en la calidad y la aplicabilidad del conocimiento, es el que permitirá a las organizaciones obtener el máximo valor de sus inversiones en formación en la era de la inteligencia artificial.